Los abrasivos aplicados son el resultado de un proceso extremadamente técnico desarrollado tras muchos años de investigación. No obstante, la estructura básica sigue siendo la misma: un grano abrasivo fijado por un aglomerante sobre soporte flexible o semi-flexible.
Tipo de grano abrasivos
El grano abrasivo ideal ofrece la máxima resistencia al desgaste, pero se fractura antes de perder su filo, cumpliendo así los requisitos de eliminación de material y de acabado.
- El Óxido de Aluminio es resistente y afilado, y se fractura por presión, lo que permite su reafilado. Se adapta bien al lijado de materiales duros como el acero, el carbono, los aceros de aleación, el bronce y las maderas duras. El factor de dureza es la capacidad de resistir a la fractura, es su característica más importante, siendo el óxido de aluminio el material que supera en rendimiento a todos los demás granos abrasivos.
- El Zirconio presenta una característica única de auto-afilado que prolonga su duración en operaciones de eliminación de material. El Zirconio es adecuado para operaciones de lijado de metales y de superficies planas de madera, dado que la fractura controlada del grano produce continuamente nuevas aristas de corte.
- El Carburo de Silicio es el mineral más duro y afilado de los utilizados para abrasivos aplicados. Estas cualidades lo convierten en el abrasivo ideal para el lijado de metales no ferrosos (aluminio, latón, magnesio, titanio, etc.), caucho, vidrio, plásticos, maderas fibrosas, esmaltes y otros materiales relativamente blandos. El carburo de silicio es superior a cualquier otro abrasivo en cuanto a capacidad de penetración y de corte rápido con presión baja.
- El Óxido de Aluminio Cerámico es un abrasivo duradero, duro y denso debido a su microestructura. Sus partículas son extremadamente pequeñas (microscópicas) y se fragmentan durante el lijado, produciendo nuevas aristas cortantes. Mientras se mantenga afilado, especialmente al utilizarse en operaciones de presión media y alta, corta a una velocidad mayor que otros abrasivos. Se recomienda su uso en aplicaciones sobre acero forjado y al carbono, y en níquel y cobalto de alta aleación.
Distribución del grano abrasivo
Existen dos tipos de distribución del grano abrasivo sobre el soporte:
• Distribución de estructura abierta, en la que entre el 30% y el 60% del soporte está recubierto de grano abrasivo, dejando amplios espacios entre cada grano. Se utiliza en operaciones en las que la acumulación de partículas puede provocar el embozamiento de la superficie abrasiva, provocando una reducción de la eficiencia del corte y de la duración del abrasivo aplicado.
• Distribución de estructura cerrada, en la que el grano cubre completamente la superficie del soporte. Un mayor número de puntos de abrasión en una zona dada provoca una eliminación de material más rápido. Se recomienda su uso cuando el embozamiento no supone un problema y cuando se desea un acabado más liso de las superficies.
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